Originalmente, las fronteras geopolíticas son abstracciones plenas. Se trata de trazos arbitrarios que en muchas ocasiones poco tienen que ver con las prácticas culturales y los imaginarios que contienen, o mejor dicho que separan.

En realidad los criterios definitivos de este tipo de fragmentación cartográfica responden más a conflictos armados y rencillas históricas que fueron definiendo lo que hoy conocemos como naciones y, también hay que decirlo, con el tiempo fueron asimismo permeando entornos culturales.

Uno de los aspectos más absurdos de la conceptualización geográfica tiene que ver con los pasaportes, documentos identitarios que son bienvenidos, o lo contrario, en un país determinado.

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No sólo se trata, con algunas pocas excepciones, de ingresar a otro país que no sea el tuyo sin presentar este documento universalizado, sino que en muchos casos el pasaporte no basta –dependiendo de cuál sea la relación entre tu país de origen y el país de destino. Cuando esto ocurre hay que solicitar un permiso extraordinario, comúnmente llamado visa, y sobra decir que tu solicitud puede ser aplazada o, con frecuencia, incluso rechazada.

Pero, ¿cuáles son los países menos deseables a la hora de transitar por el mundo? O, dicho de otra forma, ¿cuáles son los países cuyos pasaportes no bastan para cruzar un mayor número de fronteras?

Pasaportes más inútiles del mundo

A continuación te presentamos una lista de estos poco cotizados pasaportes, su país de origen y el limitado número de destinos a los que se puede acceder sin necesidad de una visa:

1. Afganistán (25)

2. Pakistán (29)

3. Irak (31)

4. Somalia (31)

5. Siria (32)

6. Libia (36)

7. Eritrea, Etiopía, Nepal, Sudán, Palestina e Irán (37)

En contraste, si echamos un vistazo al pasaporte más poderoso del planeta, el de Alemania, comprobamos que un pasaporte alemán es suficiente para ingresar a 177 de 218 destinos posibles.